Todas las Rosario, más de 130.000 mujeres en España, celebran hoy su onomástica aunque quizá no todas conozcan por qué es su santo el 7 de octubre y otras curiosidades que encierra este nombre.
Corona de rosas
Del latín «rosarĭum», Rosario significa «corona», «manojo», «colección» o «jardín de rosas»
Las cuentas de un rezo
Un rosario es un rezo de la Iglesia católica, en que se conmemoran los quince misterios principales de la vida de Jesucristo y de la Virgen, recitando después de cada uno un padrenuestro, diez avemarías y un gloriapatri, según la Real Academia de la Lengua.
Para ello se utiliza una sarta de cuentas, separadas de diez en diez por otras de distinto tamaño, unida por sus dos extremos a una cruz, precedida por lo común de tres cuentas pequeñas, que suele adornarse con medallas u otros objetos de devoción y sirve para hacer ordenadamente el rezo del mismo nombre o una de sus partes.
Santo Domingo de Guzmán y el rezo
El rezo del rosario surgió en el siglo IX en los monasterios. Por aquel entonces los monjes rezaban los 150 salmos y a los laicos, dado que la mayoría no sabía leer, se les enseñó a rezar 150 Padres nuestros y con el tiempo se formaron otros tres salterios con 150 Aves Marías, 150 alabanzas en honor de Jesús y 150 alabanzas en honor de María, según recuerdan en la web de Aciprensa.
Estos acabarían fusionándose e integrando en cada decena la meditación de un hecho de la vida de Jesús o María. El Catecismo de la Iglesia Católica, en su número 2678, recuerda que «la piedad medieval de occidente desarrolló la práctica del rosario en sustitución popular de la Liturgia de las Horas».
La tradición cuenta que la Virgen María se apareció a Santo Domingo de Guzmán en el monasterio de Prouille en 1208 cuando éste rezaba para que le sostuviera en la lucha contra los albigenses.
La Virgen llevaba un rosario en sus manos que le enseñó a rezar y se lo entregó como un arma para la conversión de herejes y pecadores. Se le llamó rosario porque se utilizaban rosas para adornar la corona de la Virgen y a la Madre de Dios se le llamaba desde antiguo «rosa mística».
El rezo del rosario se extendió a partir de entonces de la mano de los dominicos, aunque su uso acabó decayendo hasta que el beato Alano de la Roca recuperó el rezo en Colonia (Alemania) durante el siglo XV. En la catedral de Colonia se conserva la representación más antigua de esta tradición. En un tríptico del siglo XV aparece la Virgen con el niño, que tiene en sus manos un Rosario. Algunos ángeles coronan de rosas a la Virgen mientras Santo Domingo de Guzmán y San Pedro Mártir sostienen su manto protector sobre los fieles.
¿Por qué el 7 de octubre?
En aquel día de 1571 los cristianos vencieron en la batalla naval de Lepanto a la flota turca. El Papa Pío V, que aguardaba en Roma rezando el rosario, vio en esa victoria encabezada por el Imperio español la intercesión de la Virgen e instauró la festividad de «Nuestra Señora de las Victorias». El Papa Gregorio XIII cambió después el nombre de la solemnidad por el de «Nuestra Señora del Rosario».
Desde entonces el rezo del Rosario se popularizó. En otras apariciones marianas, como Fátima o Lourdes, los videntes contaron que la Virgen llevaba un rosario en sus manos y les instó a rezar el rosario.
El rosario de la aurora
A partir de 1690 surgieron en Sevilla cortejos que salían a las calles rezando el rosario de madrugada. Los rosarios públicos que se extendieron después por el resto de España y las colonias americana.
De la trifulca que hubo en el rezo de uno de estos rosarios en el siglo XVIII parece ser que nació el dicho popular de que «esto va a acabar como el Rosario de la Aurora».
Charo
Es el hipocorístico de Rosario. Actualmente 185 mujeres se llaman Charo en España, según el Instituto Nacional de Estadística. Tienen una edad media de 42 años.
La tercera ciudad más poblada de Argentina
Rosario es también el nombre de la tercera ciudad más poblada de Argentina. Nació sin acta fundacional a comienzos del siglo XVII, como Pago de los Arroyos, aunque en el siglo XIX era conocida como Villa del Rosario. Fue el tiempo y la costumbre popular la que adoptó y fue transmitiendo su nombre en veneración a la Virgen del Rosario.
El padre Ambrosio Alzugaray había llevado una imagen de la Virgen en 1730 y se instaló en una capilla que pasó a llamarse «del Rosario». el nombre pasó al Pago y luego a su condición de villa, según relata la web del Concejo Municipal.