Medjugorje está de plena actualidad. De vuelta de su reciente visita a Fátima el Papa habló de este lugar de peregrinación mariana y poco después en Italia se publicaban las conclusiones del informe Ruini que encargó el Papa Benedicto XVI sobre las apariciones, y que tiene Francisco en sus manos desde hace tres años.
La principal conclusión de los reputados expertos que participaron en la investigación era la casi unanimidad en reconocer la sobrenaturalidad de las primeras 7 apariciones mientras que las posteriores generaban bastante más dudas por lo que fueron votadas por separado produciéndose una oposición mayoritaria a su reconocimiento (Puede leer aquí los principales datos del informe).
Por otro lado, está el papel del enviado especial que el Papa Francisco envió a Medjugorje para analizar la situación pastoral de este lugar y cuyo informe enviará al Pontífice a finales de junio. El arzobispo polaco Henryk Hoser ha hablado en varias ocasiones de los importantes frutos espirituales que se dan en este pueblecito bosnio, especialmente el de la confesión y el de adoración.
Sin embargo, este viernes el enviado papal concedió una entrevista en Avvenire, propiedad de la Conferencia Episcopal italiana, donde él mismo proporcionó un dato que puede tener más relevancia de la que pudiera parecer.
El enviado del Papa habla de una posible solución a Medjugorje
Monseñor Hoser respondió al gran interrogante que se suscita tras hacerse público el informe Ruini. Cómo separar las supuestas primeras siete apariciones, las producidas entre el 24 de junio y el 1 de julio de 1981, de las que se vienen produciendo hasta el día de hoy. Para ello, citó Kibeho, el santuario mariano de Ruanda donde también se apareció la Virgen en la década de los 80.
El enviado del Papa sabía muy bien de lo que hablaba puesto que llegó en 1975 a Ruanda como misionero palotino. Durante el genocidio ruandés llegó a ser visitador apostólico en el país y tras la sangrienta guerra civil fue superior de la orden en Ruanda y en otros países de la zona hasta que fue nombrado para otras responsabilidades por el Papa en Europa.
Las similitudes que rodean a Medjugorje y Kibeho en algunos aspectos son muy similares por lo que la solución por la que se optó en África podría ser válida para Bosnia, al menos en parte. Así al menos lo dejó entrever el enviado del Papa en la entrevista con el periódico italiano. Y una pregunta que surge es si Francisco pudo elegir a monseñor Hoser para esta misión conociendo ya el precedente de Kibeho, del que el polaco era un experto.
Las similitudes que podrían existir entre Medjugorje y Kibeho
Desde 2001 existe un reconocimiento oficial por parte de la Iglesia de las apariciones en Kibeho. El 29 de junio de ese año el obispo de Gikongoro, Augustin Misago, aprobó a nivel diocesano la veracidad de las apariciones. Poco tiempo después era refrendado por la Santa Sede.
1981. En este año empezaron las supuestas apariciones tanto en Medjugorje como en Kibeho. En junio fue Bosnia y en noviembre en Ruanda. En ambos casos la Virgen se habría aparecido a varios videntes y todos ellos adolescentes. Del mismo modo, empezaron algunos años antes de las terribles matanzas entre habitantes de un mismo país como ocurrió en los dos países, las cuales habrían sido avisadas por María en sus mensajes.
A pesar de las similitudes, existe una diferencia de calado. Mientras que en África ha habido un reconocimiento por parte del obispo local, en Medjugorje los sucesivos obispos en cuya jurisdicción esta este pueblecito afirman que «no se puede afirmar que se está tratando con apariciones y revelaciones sobrenaturales”
Sólo se reconoció a tres de los videntes y las primeras apariciones
En Kibeho, pese a que las apariciones se alargaron años y tenían siete videntes, seis niñas y un niño, finalmente tras dos investigaciones, tanto teológica como médica, sólo se reconoció a tres videntes y las primeras apariciones. Sobre los otros cuatro jóvenes y el resto de mensajes hubo reservas en las investigaciones por lo que el obispo no confirmó la autenticidad de esas visiones ni de sus protagonistas.
¿Podría darse una solución parecida, salvando las distancias, para Medjugorje? El propio arzobispo Hoser no lo descarta, por las similitudes, pero para ello es mejor conocer con más detalle lo que ocurrió en África a principios de los 80.
Así fueron las apariciones en Kibeho
En este lugar del sur de Ruanda, y según el relato aprobado por la Iglesia, la Virgen se apareció en primer lugar a Alphonsine Mumereke el 28 de noviembre de 1981. Tal y como recordaba Cari Fili News, nadie la creyó y sufrió el acoso de sus compañeros, especialmente de Marie Claire Mukangango. Por ello, esta joven que entonces tenía 16 años pidió a la Virgen que se apareciese a alguna otra chica como prueba de su veracidad. Y esto sucedió con Anathalie Mukamazimpaka, y posteriormente, con la misma Marie Claire.
¿Una visión del genocidio?
El mensaje de Nuestra Señora de Kibeho, quien se presentó a ellas como la Madre del Verbo fue un mensaje sencillo de arrepentimiento por los pecados, de amor a Dios y al prójimo y de oración, en particular del Rosario de los Siete Dolores.
Pero además, el 19 de agosto de 1982 mostró a las tres chicas una terrible visión de muerte, violencia, sangre, fuego y destrucción. Ellas describieron ríos de sangre, pilas de cráneos, gentes matándose con saña.
Una de las videntes fue asesinada en el genocidio ruandés
Cuando las visiones y mensajes desaparecieron aún faltaban años para que tuviesen lugar las espantosas matanzas en Ruanda, fundamentalmente de los hutus contra los tutsis, que costaron un millón de vidas y horrorizaron al mundo hace dos décadas. Todo se verificó tal cual ellas lo habían visto, incluso en Kibeho, donde murieron cinco mil refugiados, entre ellos la vidente Marie Claire.