Decenas de miles de católicos irlandeses desafiaron el frío, la lluvia, las tormentas e incluso la alerta amarilla por nieve para acudir el pasado domingo por la tarde a la costa de su país y rezar juntos el Rosario para pedir auxilio a la Virgen María para que preserve la fe de un país católico que vive una importante crisis espiritual y para que defienda la vida humana ahora que el gobierno quiere convocar un referéndum para legalizar completamente el aborto.
En la festividad de Cristo Rey, la fecha no fue elegida por casualidad, los católicos acudieron a algunos de los 295 puntos registrados a lo largo de la costa irlandesa, mientras que los que no pudieron unirse físicamente debido a las duras condiciones meteorológicas del noviembre en dichas latitudes lo hicieron desde casa o en alguna parroquia.
Sin miedo al mal tiempo
Rosary on the coast se inspiró en la exitosa iniciativa polaca que reunió a cientos de miles de personas en las fronteras de Polonia.
Los organizadores del rezo del Rosario se han mostrado sorprendidos por la gran participación. «A pesar de las alertas meteorológicas amarillas de congelación de nieve, aguanieve y vientos fuertes, decenas de miles de personas se reunieron en las costas de Irlanda para orar por la protección de la vida y la preservación y florecimiento de la Fe en la isla de Irlanda”, aseguran en un comunicado.
En la iniciativa participaron tanto los católicos de Irlanda como de la región británica de Irlanda del Norte, mostrando unidad y pidiendo protección para toda la isla. Curiosamente, en ambas existen todavía legislaciones restrictivas contra el aborto, y también en ambos casos están siendo presionados para permitir el aborto prácticamente libre.
Al menos siete obispos han participado
En muchos de los puntos, los católicos se concentraron alrededor de alguna imagen de María o llegaron al lugar en procesión con la Virgen. Además, destaca la implicación de la jerarquía en esta iniciativa pues los obispos también participaron en el rezo del Rosario en la costa.
En declaraciones a Church Militant, los organizadores aseguran que “sabemos de al menos siete obispos que asistieron a los puntos de oración y un sorprendente número de sacerdotes diocesanos y religiosos, en particular dominicos”.
Enterrando medallas milagrosas por la costa
El domingo se celebraba además la vigilia de la fiesta de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa por lo que también muchos participantes enterraron medallas milagrosas en las costas irlandesas “para formar una capa de protección alrededor de Irlanda”.
(En el vídeo se puede el mal tiempo y cómo enterraban las medallas milagrosas).
“Cuando honramos a Cristo como Rey, ¡somos llevados inmediatamente a su Reina, María y su Inmaculado Corazón!”, afirmaban los promotores de esta oración.
María, Reina de las Familias, ruega por nosotros
El Rosa io será el medio para la salvación del mundo