El 15 de febrero de 2019, unos terroristas islámicos en motocicleta dispararon con armas de fuego contra un puesto aduanero en Nohao, en el sur de Burkina Faso, y mataron a cinco funcionarios y a un misionero español, el salesiano andaluz Antonio César Fernández Fernández.
Muchos misioneros en África confiesan su deseo de poder morir allí, en su trabajo, con la gente a la que han querido servir. A Antonio César, natural de Pozoblanco (Córdoba) se le concedió. Tenía 72 años. Había sido misionero en diversos países de África desde 1982. Puso en marcha la misión salesiana en Togo. Trabajó en Benin y más recientemente en Burkina Faso. Fue el representante de toda el África Occidental Francófona en el capítulo general de los salesianos de 2002. Cuando murió, llevaba 55 años como salesiano y 46 como sacerdote. Toda una vida entregada a los jóvenes de África.
Sus compañeros conocían bien su devoción mariana. «Que María Auxiliadora, a la que tanto amó, lo acoja con el cariño de Buena Madre del cielo», decía el comunicado de prensa que difundía su fallecimiento.
Un deseo: una María Auxiliadora para Benin
Antonio César tenía otro deseo: quería colocar una imagen de María Auxiliadora en la casa de los salesianos de Porto Novo, la capital de Benín. Y no una cualquiera: quería que fuera como otra, la que le gustaba a él, la de la capilla privada de los salesianos en el Santuario de María Auxiliadora de Córdoba.
Durante su última visita a los salesianos de Córdoba, les explicó su deseo de tener una imagen así en el Prenoviciado salesiano de Porto Novo.
Ahora, a los 2 años de su muerte, se ha cumplido también este deseo. La Virgen cordobesa ha llegado a Porto Novo y ha sido recibida por la multitud alegre de niños y jóvenes que siempre rodea a los salesianos. Y no es una copia, sino la que gustaba tanto al misionero asesinado.
Los salesianos de Córdoba se despiden de la Virgen que los ha acompañado 25 años.. ¡se va a misiones!
Pensada para procesiones, durante años en un capilla
La imagen es obra del escultor cordobés Marco Augusto Dueñas, y fue creada hace 25 años. En un principio, se quería que se utilizara en las procesiones del 24 de mayo, en vez de usar la imagen que desde 1908 preside el altar del Santuario de María Auxiliadora de Córdoba. Pero después se decidió que no se usara en el culto público, sino que permaneciera en la capilla privada de los salesianos.
Y ahora va a empezar una vida nueva en África, ante la mirada asombrada de multitud de niños, muchos de ellos muy necesitados del auxilio de una Madre en el Cielo.
El camión con la Virgen llega al centro salesiano de Porto Novo, en Benín
«A los 25 años de su bendición, para nosotros es un motivo de alegría hacer esta donación a la Comunidad Salesiana de Porto Novo. Que la imagen de la Virgen que fue bendecida en el mismo sitio donde nuestro hermano Antonio César recibió el crucifijo de misionero pueda estar ahora en esas tierras es un signo de comunión. Ella nos une y nos hace sentirnos más hermanos», subraya en un comunicado el padre José Antonio Perdigones, director de la Casa Salesiana de Córdoba.
Así, María cumplirá una vez su papel de Madre, que siempre implicará unir a sus hijos, no importa qué países o distancias los separen.
En este vídeo, el salesiano asesinado explica lo que le llevaba a África
María, Salud de los enfermos, ruega por nosotros