Primero fue un manicomio, el primero de Occidente, una casa para acoger y cuidar a los enfermos mentales, en Valencia en el siglo XV. Y después la devoción a la Virgen que cuidaba a esos «inocentes y desamparados», que se inclinaba sobre ellos y los protegía. Y con ellos, a todos sus otros hijos.
Ahora la editorial Almuzara, cordobesa, en su colección de grandes devociones religiosas, dedica uno de sus libros a esta advocación, la Virgen de los Desamparados de Valencia. La editora Rosa García Perea, de Sevilla, se lo encargó al periodista valenciano Baltasar Bueno Tárrega, autor de numerosos artículos, reportajes y varios libros sobre la historia de la Patrona de Valencia. Se da la circunstancia de que la imagen peregrina de la Virgen de los Desamparados visita Sevilla los días 8 al 10 de noviembre: en su honor habrá numerosos actos en la Casa Valenciana de Sevilla y en parroquia de San Vicente Mártir.
Baltasar Bueno explica a los sevillanos la profundidad de esta advocación…
– La Virgen de los Desamparados de Valencia en Sevilla…
– La Virgen valenciana la tenéis aquí más de un siglo, es venerada en la parroquia de san Vicente Mártir, patrón de Valencia. Se la trajeron los agricultores valencianos que llegaron aquí a dedicarse al cultivo de la naranja y el arroz. Ahora viene la peregrina que hace las veces de la histórica –que el próximo año cumplirá 600 años- a Sevilla, a estar con valencianos y andaluces unas horas. Un momento ideal para sacar a la calle un nuevo libro sobre la Virgen de los Desamparados que tiene una peculiar historia social y de salud, de revolución sanitaria..
– ¿Qué cuenta el libro?
– Es mi libro número 23. Es un viaje a través del tiempo que nos lleva a descubrir la profunda devoción del pueblo valenciano hacia su patrona. Emocionante historia desde el momento en que surgió la advocación de la Virgen, cómo ha sido venerada y protegida por los valencianos a lo largo de los siglos, y cómo su figura ha sido un faro de esperanza en tiempos de necesidad y tribulación. Desde el esplendor del Siglo de Oro valenciano hasta los desafíos contemporáneos, revelando los misterios y milagros asociados a la Virgen y su inquebrantable vínculo con la ciudad de Valencia.
– ¿Cómo andamos de bibliografía de la Virgen de los Desamparados?
– “La devoción del pueblo valenciano a su Patrona la Santísima Virgen de los Desamparados se ha expresado siempre en espléndidas manifestaciones del más ardiente culto, que no se correspondía con lo poco difundida. No abundan los libros en que se trate con toda extensión de su brillante historia”, afirmaba el historiador Francisco Almarche Vázquez, a principios del siglo XX. Esta sequía literaria a lo largo de la historia respecto a la advocación e imagen de Nostra Donna Sancta dels Ignoscens e Desamparats comenzó a remontarse ya en el siglo XX con los interesantes estudios de un médico de profesión e historiador de vocación, José Rodrigo Pertegás, médico de Alcublas y luego de Valencia, actividad que al final dejó seducido por la investigación de la historia valenciana.
-¿Un médico el mejor historiador de la Virgen?
– Rodrigo Pertegás conoció papel a papel, documento a documento, el total del interesante Archivo de la Cofradía de la Virgen, pasó largo tiempo escrutándolo, lo que laboriosamente desplegó en “Historia de la Antigua y Real Cofradía de Nuestra Señora de los Inocentes Mártires y Desamparados de la veneranda Imagen y de su Capilla”, obra clásica, básica e imprescindible para conocer no sólo la historia de la Cofradía y el Hospital de Locos, sino también para saber de la advocación e imagen de la Virgen de Valencia. Nadie lo ha superado. El P. Juan Bautista Antón lo mandó reeditar, cuando ya estaba olvidado, en su tiempo de Capellán Mayor de la Basílica.
– ¿Y los clérigos no han escrito sobre la Virgen?
– No mucha cosa, si exceptuamos al recordado P. Emilio María Aparicio Olmos, quien, en su etapa como Capellán Mayor de la Real Basílica y Prior de la Cofradía de la Virgen, dedicó largas horas de velada a investigar, escribir y publicar sobre la historia y actualidad cultual en torno a la advocación e imagen de la Virgen de los Desamparados, de manera que fueron varios los libros y muchos los artículos especializados que publicó. Una de sus obras fue su tesis doctoral en Historia en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Valencia dedicada a “Santa María de los Inocentes y Desamparados en su iconografía original y sus precedentes históricos”. El P. Aparicio ejerció de cronista, relator del diario vivir y acontecer de lo que sucedía en torno a Ella, y nos ha dejado preciosas consuetas, valiosísimos testimonios de cosas y hechos que él vivió y conoció en primera persona. Cuando se retiró a la vida monástica y ejerció de abad en la comunidad benedictina en el Valle de los Caídos publicó obras sobre la Virgen de los Desamparados en inglés.
– ¿Y ya luego ha tenido que ser un periodista quien escribiera sobre la Virgen?
– Sí. Tras el P. Emilio María Aparicio López, la Virgen volvió a sequía de publicaciones y yo hice varios libros sobre su historia que tuvieron mucho éxito, se agotaban enseguida. Había hambre de Virgen. Siempre me ha subyugado su historia, su rica historia y cómo la inventaron los valencianos, no necesitaron que se le apareciera mistéricamente. Ahora los propios y foráneos que tengan interés en tener una historia de la Virgen de los Desamparados tienen una a su alcance. Valencia y su Virgen no se pueden entender por separado. Han estado entrañablemente unidas a lo largo de seis siglos, sobre todo en tiempos de especial penuria, conflicto o calamidad.
– ¿Decías que la Virgen de los Desamparados la inventaron los valencianos?
– Sí. Es una advocación, Nostra Donna Sancta dels Ignoscens e Desamparats, que nació surgida del propio pueblo antes que la imagen, inventada por la necesidad imperiosa de hallar una Patrona y Protectora del hospital de la revolución de la psiquiatría que en Valencia fue fundado, primer manicomio de Europa, en los inicios del siglo XV, basada fundamentalmente en la terapia ocupacional y del amor. Un método y sistema para nada casposo, muy actual, incluso en peligro de extinción, porque nuestra sociedad ha devuelto los locos al desamparo de la calle.
»Es una Virgen que no es geográfica, ni aparecida, ni de reconquista, sino del pueblo, Virgen de pobres y desgraciados, de abandonados y marginados, Mare dels qui no tenen mare. Pensada, amada y proyectada por los valencianos para atender, servir y proteger, en principio, el Hospital de Locos, el primer manicomio del mundo, invento también de los valencianos en un tiempo en el que a los enfermos mentales se les tenía por endemoniados, sin cura posible, excluidos de la familia y de la sociedad, totalmente desamparados.
– Se habla de arte en el libro también…
– Una de las obras de arte más grandes es obra de un pintor cordobés, Antonio Palomino, gloria y apoteosis, plasmada en la bóveda de su Real Basílica, y a través de los asombrosos tapices, retablos de flor, que todos los años son levantados con motivo de su fiesta el segundo domingo de mayo.
»De las joyas y vestuario de la Virgen se da cuenta en sus justos términos, pues los nuevos senderos y cánones estéticos de la iconografía artística religiosa tienden, al menos en lo que concierne a la Virgen valenciana, a que la imagen no se convierta en un muestrario de joyería, como tampoco que la belleza de su talla original quede oculta atiborrada de ampulosos mantos, petos, pecherines y escapularios, fruto del barroquismo valenciano del XVII.
-Valencia es festera por antonomasia y le tendrá grandes fiestas…
-El libro relata las emotivas y tumultuosas fiestas que se le tributa a la Mare de Déu dels Desamparats en llegando el florido mes de mayo a Valencia con gran fervor e ímpetu. Fiestas con momentos de grandes contrastes, vibrantes llenas de vítores y emociones en la Missa de Descoberta, serenas en el candor de la Missa d Infants, de mar gruesa y fuerte marejada en el Traslado y emociones contenidas en la procesión de la tarde en el caminar de la Virgen despacio por las calles de la ciudad convertidas en engalanados salones palaciegos preparados para recibir a su Reina.
» Su templo es el único de la Diócesis y de la propia ciudad permanentemente lleno de gente a todas horas de todos los días del año. Gente de toda clase y edad que acuden a verla, a visitarla, a rezarle, que no saben pasar por delante de su casa, de su Real Basílica, sin entrar a verla, a hablar con Ella. Y que por las noches, cuando cierra sus puertas, en la puerta al pie, la principal, hay unas ventanitas a través de la cual puedes verla y rezarle. Veinticuatro horas.
– ¿Lleva dedicatoria el libro?
– Sí, dos. Una a María Consuelo Reyna, la primera mujer directora de periódicos de España, quien me hizo periodista, y ha hecho el prólogo, la típica columna de ella, y otra a la Congregación de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, que con sus 120 casas en el mundo realizan a diario el gran milagro de la Virgen de los Desamparados.
En el vídeo, la imagen peregrina en la localidad de Mislata:
