Desde la colina de Medjugorje, el padre Javier Siegrist dirige el rezo del Rosario y hace una meditación para contemplar el tercer misterio gozoso, el Nacimiento del Hijo de Dios. Sus palabras nos invitan a considerar el amor de Dios, que en su infinita grandeza desciende a nuestro nivel para tomar nuestra carne. Con esta reflexión, la Fundación Cari Filii desea a todos una muy feliz Navidad.