El 26 de septiembre se presentó en la sala Cardenal Deskur del edificio San Carlos del Vaticano la película Dos coronas, una película que presenta, en forma mixta de interpretación y documental, aspectos poco conocidos sobre San Maximiliano Kolbe (1894-1941), fundador de la Milicia de la Inmaculada.
Estuvieron presentes el director de la obra, Michal Kondrat y el actor que da vida al santo, interpreta al santo, Adam Woronowicz. Con rigor histórico y acudiendo para la parte documental a expertos en la figura de Kolbe, Dos coronas representa también escenas y momentos de su vida que sirven para conmemorar el centenario de su gran obra de devoción mariana.
Han sido dos años de producción en Polonia, Japón e Italia, los lugares de su apostolado, que culminaron con su exhibición en el Festival de Cannes el pasado mes de mayo. Este mes de octubre se estrenará en Polonia y progresivamente luego en todo el mundo. Pero el impulso que ha recibido de la Maximilian Kolbe Film Foundation no es solamente celebrativo, pues se trata también de mostrar a la sociedad la fuerza de las virtudes cristianas hoy, encarnadas en quien las vivió en grado heroico.
Tanto como ofrecer su vida por la de un padre de familia que iba a ser fusilado en Auschwitz como parte de una represalia. El film recoge testimonios de aquella época, como el del prisionero 918, Kazimierz Piechowski, quien evoca su fortaleza: “Me puso la mano en el hombro, y me dijo: Esperanza, sólo hay esperanza”, explicó.
«Era una persona tan excepcional. Gracias a la película que presentamos hoy, mucha gente aprenderá de él», declaró Woronowicz a Rome Reports.
Por su parte, Kondrat recuerda que no solo el episodio de Auschwitz es un polo de atracción para un cineasta: “Quiero despertar interés en personas de todo el mundo sobre la historia de Maximiliano Kolbe. Ya es conocido porque dio su vida para salvar a otro en Auschwitz. Pero hizo otras cosas imposibles en Japón, en Italia, en Polonia. Creo que su vida es perfecta para una película».
La inversión de 250.000 euros, pequeña para un proyecto de estas características, ha dado un fruto muy bien recibido, y así el padre Raffaele di Muro, actual presidente de la Milicia de la Inmaculada, opina que «es una película interpretada por actores, pero también tiene una parte documental en la que hablan expertos y testigos. La cinta cubre su vida desde un punto de vista histórico, pero también espiritual”. Y en ese sentido, el embajador de Polonia ante la Santa Sede, Janusz Kotanski, declaró que: “Él es cada vez más actual, porque también hoy hay muchas personas que sufren y muchos cristianos que están siendo asesinados por su fe. Creo que Maximiliano Kolbe es todavía un ejemplo de santo para nuestro tiempo”.
Ya se están preparando versiones en español, inglés e italiano de Dos coronas, un título que hace referencia a la visión de la Virgen María que experimentó San Maximiliano en 1906, siendo aún un niño, y que él contó a su madre temblando de emoción y entre lágrimas: «Mamá, pedí mucho a la Virgen me dijera lo que sería de mí. Lo mismo en la iglesia, le volví a rogar. Entonces se me apareció la Virgen, teniendo en las manos dos coronas: una blanca y otra roja. Me miró con cariño y me pregunto si quería esas dos coronas. La blanca significaba que perseveraría en la pureza y la roja que seria mártir. Conteste que las aceptaba… (las dos). Entonces la Virgen me miro con dulzura y desapareció».
Una premonición del martirio que tendría lugar treinta y cinco años después, aunque para entonces ya había lanzado al mundo su milicia de hombres entregados a María y dispuestos a recibir, como él, las dos coronas.
Tráiler polaco de Dos coronas