El 1 de noviembre de 2010 llegó a la catedral de Buenos Aires la Virgen de Caacupé de Paraguay. El entonces arzobispo de la diócesis le consagró una breve pero intensa homilía proponiendo a la Madre de Dios como modelo del Sermón de la Montaña.
El 1 de noviembre de 2010 llegó a la catedral de Buenos Aires la Virgen de Caacupé de Paraguay. El entonces arzobispo de la diócesis le consagró una breve pero intensa homilía proponiendo a la Madre de Dios como modelo del Sermón de la Montaña.